Cuando se empieza en el mundo de la fotografía profesionalmente, hay una duda que se repite en nuestra cabeza: ¿cómo fijar mis precios para no salir perdiendo?

Fijar los precios adecuados para los servicios fotográficos es difícil si eres novato, especialmente en un mercado tan competitivo como el de España. Así que vamos a darte algunos consejos para establecer tarifas que sean justas para tu trabajo pero sigan siendo atractivas para tus clientes.

Lo primero que debes saber es que tus precios deberá comprender:

El tiempo de sesión (horas de fotografiado) + la pre-producción (reuniones previas, planificación, etc.) + la post-producción (selección, edición y entregado).

Lo principal, entiende tus costes

El primer paso para fijar precios correctamente es comprender tus costes operativos, así te aseguras de obtener beneficios. Estos suelen comprender:

• Equipamiento: Cámaras, lentes, trípodes, iluminación, tarjetas de memoria, y otros accesorios. Considera también el coste de reemplazo y mantenimiento.
• Software y suscripciones: Programas de edición como Adobe Photoshop y Lightroom, así como cualquier otra herramienta digital que utilices para la edición.
• Transporte y desplazamientos: Gastos de viaje para sesiones en exteriores o en diferentes ubicaciones, especialmente en bodas.
• Marketing y promoción: Costes asociados con la creación y mantenimiento de tu sitio web, publicidad en redes sociales, tarjetas de visita, y materiales promocionales.
• Gastos generales: Alquiler de estudio, facturas de electricidad, seguros y otros gastos administrativos, esta parte es la más obvia.

Haz una lista detallada donde desgloses cada uno de estos costes y calcula cuánto necesitas generar al mes para cubrirlos. Esto te dará una base sobre la que fijar tus precios.

Investiga tu competencia y mercado

Realiza una investigación de mercado para entender qué están cobrando otros fotógrafos en tu área y especialidad. Te aconsejamos fijarte en:

• Competidores directos: Fotógrafos con un nivel de experiencia, ubicación y estilo similar al tuyo.
• Fotógrafos de alto nivel: Aquellos con más experiencia y un portfolio más extenso, para entender hacia dónde puedes aspirar.
• Fotógrafos emergentes: Los novatos como tú que están empezando, para comparar con lo que cobraste al inicio de tu carrera.

Analiza sus paquetes y servicios, y toma nota de sus precios. Esta información te ayudará a situar tus tarifas dentro de un rango competitivo.

Define tu valor

Tu precio debe reflejar el valor que ofreces a tus clientes, debes ponerte a ti mismo en estima. Considera:

• Experiencia: Años de experiencia y la calidad de tu trabajo.
• Especialización: Si tienes una especialización en bodas, eventos corporativos, retratos, fotografía de moda, etc.
• Calidad del Servicio: Incluyendo la pre-producción, producción y post-producción. Si ofreces una experiencia personalizada y atención al detalle, tus precios pueden ser más altos.
• Diferenciación: Cualquier factor que te haga destacar de la competencia, como un estilo único o habilidades especiales.

Crea una estructura de precios clara

Ofrecer una estructura de precios clara y transparente es esencial para evitar confusiones y establecer expectativas. Considera lo siguiente:

• Paquetes de servicios: Ofrece diferentes paquetes que incluyan diversas combinaciones de servicios y productos (por ejemplo, horas de sesión, número de fotos editadas, impresiones, etc.).
• Precios a la carta: Para clientes que quieran personalizar su paquete, ofrece una lista de precios de servicios individuales.
• Tarifas por hora vs. proyecto: Decide si cobrarás por hora o por proyecto. Los precios por proyecto pueden ser más atractivos para eventos largos, mientras que los precios por hora son útiles para sesiones más cortas.
• Además, valora ofrecer un valor añadido a tus clientes en forma de: entrega rápida de las fotos, servicios extra en bodas como pre-bodas o post-bodas, fotografía de drones, servicio de retoque…

Se transpartente

Comunica tus precios con confianza y transparencia, que todo el mundo sepa lo que valen tus servicios. Esto te ahorrará llamadas que no llevan a ninguna parte y posibles clientes que acaben rechazando tu presupuesto. Además, estableciendo tus precios de forma clara, evitarás problemas futuros y malentendidos.